MIÉRCOLES, 13 DE DICIEMBRE DEL 2006

 

AYER

 

En la primera parte de la sesión del Plenario, antes de aprobar el acta, la señora diputada Nidia González, del PAC, pidió una explicación por las extremas medidas de seguridad tomadas por el Directorio, alrededor de los edificios y dentro de la Asamblea Legislativa. Don José Merino secundó la inquietud de la señora diputada González Morera, manifestando su extrañeza por las personas dentro del Congreso y hasta infiltrada en la barra del público. El señor Presidente Pacheco Fernández expresó su reticencia a hablar sobre el asunto, aunque no omitió decir que él estaba seguro que nadie iba a instigar a las personas que se oponen al TLC y aseguró que la barra está abierta y las medidas tienen carácter prudencial. Como el señor diputado Merino del Río preguntó “¿Quién autorizó la entrada de Seguridad Pública a la Asamblea Legislativa?”, don Francisco Antonio le respondió: “Nos preocupamos por su integridad señor diputado”. Luego, la diputada Andrea Morales, del PAC, interpeló al señor Presidente: “Acláreme, primero, por qué no se puede llenar la barra del público; y, segundo, hasta donde yo sé, la Asamblea Legislativa no tiene un rotulito de ‘nos reservamos el derecho de admisión’, para que dos oficiales en la puerta decidan quién entra y quién no”. Don Francisco Antonio le contestó dándole la razón, agregando “ayer autoricé para que se llenara la barra”. Siguió en el uso de la palabra el señor diputado Óscar López, del PASE, desmintiendo lo anterior y asegurando que dos de sus asesores no pudieron entrar “por ese ridículo dispositivo de seguridad”; “no sean ustedes los precursores de que la sangre llegue al río; aquí nadie es un delincuente; las cosas sabemos como empiezan, pero no como terminan…”, agregó el diputado López Arias. El señor Presidente Pacheco argumentó:”Para hoy se había anunciado una gran manifestación y nos preparamos para eso, aunque no fue así”. Inmediatamente después, a las tres y media de la tarde, dio por aprobada el acta de la sesión anterior.

 

En la agenda de la primera parte de la sesión, seguía el nombramiento de un miembro de la Junta Directiva del Banco Central de Costa Rica; pero, la señora diputada Sadie Bravo, del PAC, protestó porque no hubo período de control político; don Francisco Antonio le aclaró que había un acuerdo entre las fracciones, “para cumplir compromisos constitucionales ineludibles”. Siguió en el uso de la palabra el señor diputado Jorge Méndez, del PLN, Presidente de la Comisión Especial Permanente de nombramientos, quien hizo un reseña del informe de esa comisión, en el que sus miembros señalan al señor Rodrigo Oreamuno Blanco para sustituir al señor Luís Mesalles Jorba, en la Junta Directiva del Banco Central de Costa Rica. La señora diputada Evita Arguedas, del Movimiento Libertario, apoyó el nombramiento de don Rodrigo Oreamuno; luego, don José Merino, aún refunfuñando por las medidas de seguridad en el Congreso, prefirió hablar de la política económica, antes de referirse al Lic. Oreamuno Blanco. A las cuatro de la tarde, con el nombramiento pendiente, el señor Presidente Pacheco Fernández levantó la sesión, en vista de que no aparecen  asuntos en la segunda parte de la sesión.

 

A las cuatro y diecinueve minutos de la tarde dio inicio la sesión de la Comisión Especial Permanente de relaciones internacionales, para continuar, en esta última ocasión, con la discusión de mociones que contienen cláusulas interpretativas, cuyos proponentes pretenden incorporar en el Tratado de libre comercio de Centroamérica y República Dominicana con los Estados Unidos, expediente No. 16047. Comenzaron con las presentadas por el señor diputado José Merino, las cuales fueron rechazadas. Siguieron varias del PAC, las cuales corrieron la misma suerte.

 

La comisión ha sesionado desde el lunes casi ininterrumpidamente, con dos sesiones diarias; “a golpe de tambor”, como ha señalado la señora diputada Sadie Bravo, del PAC. Esto ocasiona un aumento de trabajo para la secretaría de la comisión especial, que debe tener lista el acta de la sesión anterior en el momento en que inicia la siguiente y, generalmente, sesionan al menos una hora sin aprobarla, mientras la secretaría termina de confeccionarla. Ayer sucedió así y, a la hora y media del inicio de la sesión, a las seis y treinta de la noche, fue repartida el acta de la sesión anterior, momento que aprovechó la señora diputada Janina del Vecchio, Presidenta de la comisión especial permanente, para decretar un receso de una hora.

 

Después del receso, la discusión se concentró en el tema de la soberanía nacional y la superioridad del tratado sobre las leyes nacionales ordinarias. Posteriormente, la señora diputada Lesvia Villalobos, del PAC, mencionó el Tratado internacional que protege a las poblaciones indígenas, estableciendo la obligación del Estado de consultar a esas comunidades, cuando sus intereses se vean afectados, como en este caso. Según doña Lesvia, los indígenas van a ser los más perjudicados cuando vengan las compañías exploradoras de metales o de hidrocarburos.

 

A las ocho y media de la noche, con la barra del público llena, las señoras diputadas María de los Ángeles Antillón, del PLN, y Evita Arguedas, del Movimiento Libertario, a pasar del abucheo de de los visitantes, hicieron uso de la palabra como las más férreas defensoras del tratado, frente a las mociones y los pronunciamientos de los diputados del PAC y del señor diputado Merino del Río, del Frente Amplio, quienes recibían el aplauso después de cada una de sus disertaciones.

 

Faltando cinco minutos para las nueve de la noche, le llegó el turno a una moción del diputado Merino del Río, con una cláusula interpretativa relativa a la educación universitaria privada, en el sentido de que el tratado no afecta la autoridad y la competencia del Consejo Nacional de la Educación Superior Privada (CONESUP), en materia de autorización para la creación y el funcionamiento de universidades privadas. Don José advirtió que el tratado contempla a la educación como una mercancía más, desde un punto de vista comercial o mercantil; y, aunque contiene una reserva sobre la educación pública, esta reserva es insuficiente, porque solo cubre a las instituciones educativas del Estado. Lo acompañó en su alegato la diputada Andrea Morales, del PAC, reiterando que solo la Constitución Política se salva del impacto que el tratado producirá en la legislación nacional, fundamentando con ese argumento la necesidad de incorporar esta cláusula, para proteger a la educación nacional. Terció, en la defensa de la moción, el señor diputado Ronald Solís, del PAC, aunque esgrimiendo los mismos planteamientos. La señora diputada Sadie Bravo, del PAC, se refirió a un proyecto de ley que presentará próximamente con el nombre de Ley de creación de la Superintendencia de la educación superior universitaria privada, aunque no quedó clara su intención. La dificultad actual que muestran el CONESUP y el Estado, para supervisar los centros docentes universitarios privados, representando la víspera de lo que sucederá si se aprueba el TLC sin esa cláusula, fue otro de los motivos señalados por los defensores de la moción. Al final, la moción fue rechazada: tres votos a favor, seis en contra.

 

El señor diputado Fernando Sánchez, del PLN y Secretario de la comisión especial permanente, calificó como un error de los diputados la presentación de  mociones con cláusulas interpretativas, que se refieren a un aspecto puntual del tratado; él considera que las cláusulas deben tener el marco más amplio posible, abarcando el tema completamente. Por eso anunció la presentación de una moción, con una cláusula interpretativa de carácter general sobre la educación nacional, que si no puede ser votada en esta sesión, sería reiterada en el Plenario, cuando el tratado sea discutido en primer debate.

 

A las diez y media de la noche, el señor diputado Óscar López, del PASE, reiteró su amenaza: “en el Plenario voy a tapizar el TLC con mociones de reserva legal, única forma prevista por la Convención de Viena para incorporar enmiendas en los tratados; no lo digo yo, lo dice Rubén Hernández Valle; por eso este servidor no ha presentado una sola moción con cláusula interpretativa, porque no sirven para nada”. También habló sobre la mafia que ya se metió en Costa Rica, esperando la aprobación del tratado; y, aseguró que el negocio de las armas será una realidad, aunque nadie se dé cuenta.

 

Luego vino la discusión de una moción de cláusula interpretativa, para dejar claro que, ante la presentación de una solicitud de concesión sobre el material del cauce de los ríos, las municipalidades no verán menoscabada la prioridad otorgada por el Estado a estos entes para hacer uso de tales recursos naturales. “Esta es una moción muy importante”, manifestó la señora diputada Grettel Ortiz, del PAC, porque estaría negándose la potestad del ente público frente a la empresa privada y comercial.

 

Con esta moción en discusión, los diputados empezaron a despedirse. “Esto no se acaba aquí, me voy orgullosa por el trabajo realizado por nuestra fracción”, exclamó la diputada Ortiz Álvarez, del PAC; mostró las dieciséis cláusulas interpretativas presentadas por ella, con los correspondientes. El señor diputado Francisco Molina, del PAC, manifestó: “Me voy a despedir con una frase proveniente de Los Notables ‘En este tratado ganan, los que siempre ganan; y pierden, los que siempre pierden’”.

 

La moción anterior recibió solo dos votos y fue rechazada, dando paso a un receso de tres minutos. Luego, a las once y media de la noche, al reanudar la sesión, la señora Presidenta de la Comisión Especial Permanente de relaciones internacionales, diputada Janina del Vecchio, rechazando todas las mociones pendientes y siguiendo la resolución dictada por el Directorio de la Asamblea Legislativa, puso a votación el tratado: “nueve diputados presentes, seis a favor y tres en contra, aprobado”, determinó doña Janina. Inmediatamente saltaron los diputados del PAC y don José Merino, quien apeló inútilmente la decisión de la Presidenta, de someter a votación el tratado, antes de continuar conociendo mociones hasta cerca de las doce de la noche; sin embargo, en medio de los gritos de “¡Atropello!” y “¿Esta es la democracia?”, la Presidenta del Vecchio Ugalde levantó la sesión.

 

HOY

 

En vista del vacío legislativo y de los plazos dispuestos para la presentación de los dictámenes ente el Plenario, probablemente el Poder Ejecutivo envíe una ampliación de la lista de proyectos de ley de la convocatoria a sesiones extraordinarias, porque a la Asamblea Legislativa solo le queda la primera parte de la sesión del Plenario para funcionar. La discusión del TLC, en primer debate, empezará en enero.

 

Por lo tanto, hoy, en el Plenario, los diputados tendrán una hora de control político, en el que los diputados del PAC y el señor diputado José Merino,  expondrán los procedimientos que consideran irregulares en el trámite del tratado en la comisión, como preparativo a la consulta facultativa que remitirán a la Sala Constitucional.

 

Lic. Arturo Ferrer Schlager        

Consultor PREDICTA SRL