TRASLADO
DEL SECTOR DE TELECOMUNICACIONES DEL MINISTERIO
DE
AMBIENTE, ENERGÍA Y TELECOMUNICACIONES AL
MINISTERIO
DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA
Expediente
No. 17332
ASAMBLEA
LEGISLATIVA:
En
la discusión suscitada en el trámite de los proyectos: Ley general de telecomunicaciones y, de la Ley
de fortalecimiento y modernización de las entidades públicas del sector telecomunicaciones,
se trató el tema de ¿cuál debería ser el Ministerio rector de ese sector de
telecomunicaciones, si en el Ministerio de Ambiente y Energía o en el
Ministerio de Ciencia y Tecnología?
Para
lo cual se contrastó la misión del Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) de
ser ente rector de prestigio, con personal altamente capacitado y tecnología de
punta, que permita conocer todos y cada uno de los recursos naturales que se encuentran en el territorio nacional para
ayudar a la administración, en la toma de decisiones y lograr el
aprovechamiento racional de estos, acorde con las necesidades humanas y en
equilibrio con el ambiente, con la misión del Ministerio de Ciencia y
Tecnología de promover, incentivar y estimular la creación de condiciones
apropiadas para que la investigación, la innovación, el conocimiento y el
desarrollo tecnológico del país, apoyen el crecimiento económico y una mejor
calidad de vida de los costarricenses.
Debido
a lo anterior, desde el momento de la discusión se planteó la duda razonable,
sobre la pertinencia de que el sector de telecomunicaciones no debía situarse
en el Ministerio de Ambiente y Energía, cuya misión se ha centrado en la tutela
de los recursos naturales y el medio ambiente, no respecto al desarrollo de
tecnología, menos aún, en tecnología de punta indispensable en el caso de las
telecomunicaciones.
Dentro
de la visión adoptada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología se indica que
para este, el conocimiento es la base del desarrollo de los países; el futuro
de la sociedad costarricense se sustenta en el conocimiento y por tanto en la
capacidad de contar con recursos humanos de elevada calidad, basados en uno de
los mejores sistemas educativos del continente y una importante infraestructura tecnológica para orientar el país hacia
un modelo de desarrollo más competitivo y congruente con los desafíos de la
sociedad contemporánea. Infraestructura
tecnológica, afín e inseparable de las telecomunicaciones. En tanto que la visión del Ministerio de
Ambiente y Energía se enfoca a contribuir al desarrollo del país, mediante un
control eficiente de la explotación de los recursos naturales a través de la
investigación geológica y la aplicación de la normativa vigente, que permita el
aprovechamiento racional de los recursos naturales y un balance entre las
necesidades de la sociedad y el ambiente.
Si
verificamos los objetivos del Ministerio de Ciencia y Tecnología, podemos
concluir que su quehacer siempre se relaciona con la tecnología, para los
propósitos del desarrollo científico y tecnológico. En ese Ministerio se fijan como objetivos
generales: facilitar la investigación
científica y la innovación tecnológica que conduzca a un mayor avance económico
y social en el marco de una estrategia de desarrollo sostenido integral. Es totalmente transparente, el hecho de que la
ciencia y la tecnología son componentes estratégicos del modelo de desarrollo
de cualquier país, y surge obviamente una absoluta correspondencia con el
vertiginoso desarrollo del sector de telecomunicaciones.
El Ministerio de Ciencia y Tecnología tiene una
visión más atinente en el ejercicio de la rectoría en el sector de
telecomunicaciones, que involucra actividades para las cuales resulta necesario
capacitar cuadros humanos a un nivel adecuado, que les permita entender la
tecnología y participar en los proyectos de investigación y de ajuste
tecnológico que requiere el país. El
área de telecomunicaciones es dinámica; experimenta una mutación continua; los
cambios tecnológicos son abismales en cortos espacios de tiempo; existen
equipos de laboratorios relacionados con ondas electromagnéticas que corresponden
a las telecomunicaciones.
El mercado de telecomunicaciones evoluciona de
manera rauda, y requiere enormes inversiones para poder mantenerse actualizada
en tecnología, por lo que es necesario incentivar el complemento de los esfuerzos
de ahorro nacional con inversión externa. La
posibilidad de que la inversión privada inyecte recursos frescos a este sector
permitiría que el país pueda ponerse al día en tecnología.
En un mundo globalizado es de la mayor importancia
que Costa Rica cuente con los mejores servicios posibles en el área de telecomunicaciones,
es necesario que los servicios de telecomunicaciones sean modernos y
competitivos, dos áreas que empiezan a mostrar preocupantes rezagos. Ese es uno de los pilares ineludibles de
cualquier estrategia productiva con visión de futuro, nuestra política en
telecomunicaciones debe estar orientada a modernizar y fortalecer el sector con
innovación tecnológica.
La
innovación en este campo, integra los conceptos y las acciones de desarrollo
científico-tecnológico con su impacto en el desarrollo productivo y en el
crecimiento económico del país; necesarios para sustentar los mejores niveles
de calidad de vida de la sociedad costarricense. El desarrollo de una capacidad de innovación
tecnológica permanente es una condición de viabilidad para garantizar la
sostenibilidad de la competitividad nacional.
El
nuevo compromiso mundial con la ciencia ha de incluir, como una de sus grandes
aspiraciones, la disminución de la brecha que tiende a separar cada vez más a
los países desarrollados del resto del mundo, en lo que se refiere a la
capacidad de generar y utilizar conocimientos científicos y tecnológicos.
El
sector de las telecomunicaciones ha dado un importante paso por combatir la
brecha digital que pone en desventaja a los países con menor acceso a las
tecnologías. La Unión Internacional de
Telecomunicaciones (UIT), organismo perteneciente a Naciones Unidas, y la
Asociación GSM, a la que pertenecen 700 operadores de telefonía móvil, han
firmado un memorando de entendimiento con el fin de impulsar el desarrollo de
las infraestructuras de telecomunicaciones en los países menos desarrollados.
La
Tecnología de la Información y las comunicaciones (TIC) se conciben como el
universo de dos conjuntos, representados por las tradicionales Tecnologías de
la Comunicación (TC) -constituidas principalmente por la radio, la televisión y
la telefonía convencional- y por las Tecnologías de la información (TI)
caracterizadas por la digitalización de las tecnologías de registros de
contenidos (informática, de las comunicaciones, telemática y de las interfaces).
Las TIC son herramientas teórico
conceptuales, soportes y canales que procesan, almacenan, sintetizan, recuperan
y presentan información de la forma más variada. Los soportes han evolucionado en el transcurso
del tiempo (telégrafo óptico, teléfono fijo, celulares, televisión) ahora en esta
era podemos hablar de la computadora y de Internet. El uso de las TIC representa una variación
notable en la sociedad y a la larga un cambio en la educación, en las
relaciones interpersonales y en la forma de difundir y generar conocimientos.
Las tecnologías de la información y la
comunicación (TIC) son
un conjunto de servicios, redes, software y dispositivos que tienen como fin,
la mejora de la calidad de vida de las
personas dentro de un entorno, y que se integran a un sistema de información
interconectado y complementario. Las tecnologías
de la información y la comunicación, constituyen un solo concepto en dos
vertientes diferentes como principal premisa de estudio en las ciencias
sociales donde tales tecnologías afectan la forma de vivir de las sociedades.
La tecnología en telecomunicaciones del nuevo siglo está
representada por los satélites, los cuales hacen que toda la información se
transmita en menos de un segundo de un lugar a otro. También se encuentra la telefonía que ha
tenido un desarrollo muy importante desde la fibra óptica hasta los
dispositivos WiFi (redes inalámbricas), con los cuales tenemos un sin fin de
ventajas como son: el aspecto económico,
la velocidad de transmisión.
En
este escenario, la caída de los costos de comunicación, combinados con la
rápida convergencia de la computación, las comunicaciones y las tecnologías de
los medios de comunicación de masas en la "telemática", son vistos
como la "única y más importante fuerza económica que moldeará la sociedad
en la primera mitad del próximo siglo" (The Economist, 1995, p. 5). Tales "fuerzas" tecnológicas son
percibidas por una gran mayoría como las creadoras directas de una economía,
sociedad y cultura mundial, verdaderamente globalizada. Dentro de esta visión, el lugar y la
localización pierden importancia. Pronto
será posible hacer cualquier cosa, en cualquier parte y en cualquier momento;
será posible acceder a cualquier información y realizar todo tipo de
interacción a través de los ubicuos y altamente capacitados sistemas en línea. La consecuencia aparentemente inevitable sería
que la gran ciudad industrial, tal como hoy la conocemos, vería su dominio
debilitado en función de las dinámicas económicas, sociales y culturales de la
sociedad capitalista.
De
una manera más frecuente de lo que se piensa, en el centro de la investigación
social sobre tecnologías y ciudades (Mansell,
1994), las nuevas tecnologías en telecomunicaciones son vistas como la causa
directa de los cambios urbanos. Esto se
debe a la "lógica" o cualidades intrínsecas de los canales de
comunicación como espacios de trascendencia. Así, las fuerzas que se desgranan a partir de
las nuevas innovaciones en telecomunicaciones son observadas como si tuvieran
alguna autonomía de los procesos sociales y políticos (Winner, 1978), lo que Stephen Hill
llama una "aparente e intrínseca inevitabilidad tecnológica" (Hill, 1988). Invariablemente, bajo esta perspectiva, las
telecomunicaciones modernas son vistas como un "shock", una
"ola" o una "revolución" que impacta o está a punto de
impactar a las ciudades. En estos
escenarios, por consiguiente, se asume que los cambios urbanos actuales y
futuros están a menudo determinados por los cambios tecnológicos en una
relación simple y lineal de causa y efecto.
Es
así como en las políticas nacionales de ciencia y tecnología, se ha
identificado como un polo estratégico como potencial de fortalecer o crear más
eslabones en la cadena productiva y de ofrecer nuevas ventajas comparativas en
el largo plazo, la ingeniería de los materiales y tecnología de información y
comunicación. Se pretende incrementar
las capacidades de investigación, innovación y vinculación entre los sectores
académicos, productivos y políticos.
En
el quehacer del Ministerio de Ambiente y Energía, aparece circunscrita la
misión de contribuir al desarrollo sostenible de Costa Rica mediante la
conservación y uso racional de los recursos naturales, para mejorar la calidad
de vida y el desarrollo del país, con el claro cometido de prevenir amenazas
ilegítimas al derecho de disfrutar de un ambiente sano y ecológicamente
equilibrado. Se determina como su
política: el garantizar el equilibrio entre la sostenibilidad ambiental, el
desarrollo humano y la atención de las necesidades para el crecimiento del
país.
Los
sectores y subsectores, con los que despliega sus atribuciones se inscriben
todos dentro de la tutela del medio ambiente.
Así, en el sector de ambiente tiene como misión el proveer la energía y
servicios asociados innovadores que el país requiere para un mayor desarrollo y
competitividad sostenible del país, propiciando el empleo de fuentes de energía
renovable autóctonas, que sean ambiental, social y económicamente viables, con
reducción de la dependencia energética exterior.
El
subsector minería, tiene la misión de facilitar el acceso y aprovechamiento de
los georecursos para el desarrollo humano sostenible que sean ambiental, social
y económicamente viables y la política determinada en este subsector es el garantizar
el acceso a materiales mineros y geológicos requeridos por las necesidades de
desarrollo del país, sin comprometer la sostenibilidad ambiental y social de
los recursos.
Por
último, al subsector de recursos hídricos se le ha determinado la misión de garantizar
la conservación y el aprovechamiento de los recursos hídricos por parte de
todos los sectores del país para mejorar la salud y el desarrollo humano
sostenible mediante una gestión integral.
La política determinada en este tema es consolidar el papel del agua
como motor del desarrollo humano sostenible de Costa Rica, conforme a las
condiciones que impongan la construcción de una sociedad inclusiva, justa y
solidaria, así como el derecho constitucional a un ambiente sano y
ecológicamente equilibrado.
La
permanencia del sector de telecomunicaciones en el Ministerio Ambiente, Energía
y Telecomunicaciones puede constituir un foco de conflictos, por ejemplo la
derivada de una contaminación electromagnética no ionizante se da como
subproducto de las actividades de generación, transmisión y distribución de
energía eléctrica, para uso doméstico e industrial y también de actividades de
telecomunicación. Estas actividades
vistas como procesos inherentes a las actividades cotidianas de la sociedad,
dejan al hombre inmerso en un ambiente electromagnético artificial, que puede
afectar al individuo y a la población en general. Esta afectación se relaciona con el riesgo
antrópico que se deriva del uso o aplicación inadecuada de tecnologías, que se
manifiesta cuando se exceden los límites recomendados por la normativa
ambiental, los cuales pueden generar conflictos ambientales urbanos. En un tema en el que el Minaet haya otorgado
autorización, aprobado un estudio de impacto ambiental, en contraposición a un
tema tecnológico que no es el suyo, como tomar acciones oportunas para evitar
la afectación del ambiente hacer caer al país en un rezago tecnológico, dando
origen a la existencia de intereses realmente divergentes.
Igualmente,
se puede originar un conflicto si las autoridades que tienen la responsabilidad
de llevar a cabo la regulación, ejecución, control y vigilancia ambiental son
laxas o tardías en el cumplimiento de sus funciones, sobre principios como el
de cautela o prevención, frente al desarrollo apresuradamente variable de las
tecnologías de las telecomunicaciones, lo que podría interpretarse como que el
Minae asuma un papel de juez y parte en el tema.
Asimismo,
aunque esto nos agota los ejemplos, preocupa la inexistencia de criterios
técnicos propios del campo de la tecnología, para la aprobación de las
solicitudes de concesiones, autorizaciones y para adoptar políticas que
propicien el no rezago tecnológico en materia de telecomunicaciones e
información.
Por
los motivos anteriores presento a consideración de la Asamblea Legislativa, el
presente proyecto de ley.
LA
ASAMBLEA LEGISLATIVA DE LA REPÚBLICA DE COSTA RICA
DECRETA:
TRASLADO
DEL SECTOR DE TELECOMUNICACIONES DEL MINISTERIO
DE
AMBIENTE, ENERGÍA Y TELECOMUNICACIONES AL
MINISTERIO
DE CIENCIA Y TECNOLOGÍA
ARTÍCULO
1.- Refórmase el inciso a) del artículo
76 de la Ley N.º 8642, de 4 de junio de 2008, Ley general de telecomunicaciones,
para que diga:
"Artículo 76.- Ley de radio
Modifícase
la Ley de radio, N.º 1758, de 19 de junio de 1954, en las siguientes
disposiciones:
a) Se reforman los artículos 7, 8, 11, 12,
17, 18, 20, 21, 22, 23, 24, 25 y 26 de manera que donde se menciona
"estaciones inalámbricos" se lea "estaciones radiodifusoras",
donde se menciona "licencias" se lea "concesiones", donde
se menciona el "Ministerio de Gobernación" o el "Departamento de
Control Nacional de Radio" se lea "el Ministerio de Ciencia y
Tecnología".
[…]”
ARTÍCULO
2.- Refórmanse los artículos 1, 39, 50,
51 y 53 de la Ley N.º 8660, de 8 de agosto de 2008, Fortalecimiento y
modernización de las entidades públicas del sector telecomunicaciones de manera
que donde se menciona "Ministerio de Ambiente, Energía y
Telecomunicaciones" se lea "Ministerio de Ciencia y Tecnología" y
donde se indique "Minaet" se lea "Micit".
ARTÍCULO
3.- Después de la aprobación de esta Ley
el Ministerio de Ambiente y Energía seguirá empleando las siglas "Minae".
Rige
a partir de su publicación.
Maureen
Ballestero Vargas Alexander
Mora Mora
Luis
Antonio Barrantes Castro Ana Helena Chacón Echeverría
Andrea
Marcela Morales Díaz José Merino del Río
Mario
Alberto Núñez Arias Xinia Nicolás Alvarado
Edine
Von Herold Duarte José Ángel Ocampo Bolaños
Saturnino
Fonseca Chavarría
DIPUTADOS
23
de abril de 2009.
NOTA: Este proyecto pasó a estudio e informe de la
Comisión Permanente de Gobierno y Administración.